Tu felicidad

Cuando le otorgamos nuestra toma de decisiones a otra persona, al principio se siente como si nos hubiesen quitado un peso de encima. Pero al pasarle nuestra responsabilidad a alguien más, perdemos el control del resultado.

Al ser responsables de nuestras acciones, nos convertimos en amos de nuestro propio destino.

Tu felicidad está sólo en tus manos.

Mentor Espiritual

Los mentores espirituales pueden ayudarnos a acelerar nuestro proceso de crecimiento. Al ser humildes y solicitar orientación, abrimos nuestra vida a los milagros.

No importa si nos enseñan de manera formal o informal, si nos sentamos en un salón de clases o nos sentimos atraídos por algo que resuena con nosotros durante una conversación con un desconocido. Lo más importante es que estemos abiertos a expandir nuestro conocimiento.

YEHUDA BERG

¿¡Urgente!?

Urgente…
Es una palabra con la que vivimos día a día en nuestra agitada vida y a la cual le hemos perdido ya todo significado de premura y prioridad.

Urgente…
Es la manera mas pobre de vivir sobre este mundo, porque el día que nos vamos, dejamos pendientes las cosas que verdaderamente fueron urgentes.

Urgente…
Es que hagas un alto en tu ajetreada vida y por un instante te veas y te preguntes: ¿qué significado tiene todo esto que hago?

Urgente…
Es que te detengas y veas… cuan grande eres!

Urgente…
Es que cuando camines por la calle, levantes la vista, voltees y mires a tu alrededor; observa el cielo, los árboles, las aves…¡a la gente!

Urgente…
Es que seamos más humanos… más hermanos!

Urgente…
Es que sepamos valorar el tiempo que nos pide un niño.

Urgente…
Es que una mañana, te levantes temprano y veas salir el sol, siente su calor y dale gracias a Dios por tan grande regalo.

Urgente…
Es que te sientas vivo en cuerpo y alma!… que veas tus brazos, tus piernas, tu cuerpo, tu inteligencia, y de verdad, ¡ vibres con la vida que te ha regalado el Padre celestial !

Urgente…
Es que te tomes un instante en tu trabajo, salgas y respires profundo; y sientas como el aire llena tus pulmones… estas vivo!

Urgente…
Es que le digas a la gente que la quieres, cuanto la amas hoy, no esperes hasta mañana.

Urgente…
Es que no se te vaya la vida en un soplo y que cuando mires atrás, seas ya un anciano, que no puede echar el tiempo atrás

Urgente…
Es decirte hoy… gracias!!!

El desapego

El desapego implica – ” vivir el momento presente” – vivir en el aquí y en el ahora -. Permitimos que en la vida las cosas se den por sí solas en lugar de forzarlas y tratar de controlarlas. Renunciamos a los remordimientos por el pasado y a los miedos por el futuro. Sacamos el mayor provecho a cada día.

El desapego nos da la libertad de disfrutar de las relaciones o de las cosas que poseemos en la vida.

El desapego también implica aceptar la realidad, los hechos. Requiere fe en nosotros mismos, en Dios, en otras personas, en el orden natural y en el destino de las cosas en este mundo.

Desapegarse a las cosas o relaciones no se trata de ser frío o desinteresado o señal de desamor, más bien es no tener miedo a perder sea lo que sea a lo que estamos apegados.Las recompensas que el desapego nos brinda son muchas: serenidad, una profunda sensación de paz interior, la capacidad de dar y recibir amor de una manera que nos enaltece y nos llena de energía, y la libertad para encontrar soluciones reales a nuestros problemas.

Encontramos la libertad para vivir nuestra propia vida sin sentimientos excesivos de culpa o responsabilidad hacia los demás. En ocasiones el desapego llega a motivar y a liberar a la gente que se encuentra a nuestro alrededor para empezar a solucionar sus problemas.

Amar libremente a tu pareja promueve la entrega de afecto sin opresión. El desapego es sostener nuestra libertad, permitiendo, también, ser libres a quienes amamos. El desapego no es abandono, por el contrario, es un acto de amor incondicional. Quien ama verdaderamente, deja libre al otro.

El desapego se basa en las premisas de que cada persona es responsable de sí misma, en que no podemos resolver problemas que no nos corresponde solucionar, y que preocuparnos no nos sirve de nada. Adoptamos una política de no meter las manos en las responsabilidades de otras personas y en vez de ello, de atender a las nuestras.

El desapego a las cosas materiales nos permite disfrutarlas y atraerlas más a nuestras vidas. El desapego no significa abandonar todo, no trabajar más o no desear nada material, no, desapego significa no DEPENDER de nada de lo que poseemos o de ninguna persona con la cual tengamos un vínculo afectivo.Es lograr la autonomía, de ser felices aun sino poseemos o encontramos alguna cosa o una persona en específico. Muchas veces nos centramos y vemos las cosas solo con la mirada calculadora y nos fijamos en las posesiones materiales o personales que tenemos, esto es apego a las cosas materiales. Vivir de esta forma es vivir esclavizado, es vivir con temor.

Aprender en la vida el desapego nos permitirá trascender hacia un plano espiritual más elevado. No es algo fácil y dependerá de cada persona el lograr desatarse y cortar esos lazos que no le permiten crecer.

“Esta ley dice que para adquirir cualquier cosa en el universo físico, debemos renunciar a nuestro apego a ella” Esto no significa que renunciemos a la intención de cumplir nuestro deseo. No renunciamos a la intención ni al deseo; renunciamos al interés por el resultado.

Es grande el poder que se deriva de esto. Tan pronto como renunciamos al interés por el resultado, combinando al mismo tiempo la intención concentrada y el desapego, conseguimos lo que deseamos.

“Podemos conseguir cualquier cosa que deseemos a través del desapego, porque éste se basa en la confianza incuestionable en el poder del verdadero yo”.

Deepak Chopra

Desapegos

Compartiendo luz

Cada uno de nosotros tiene una tarea específica en el mundo en la que podemos revelar la mayor cantidad de Luz. No todos nosotros estamos destinados a ser profesores o maestros. Algunas veces, estamos en el lugar exacto donde necesitamos estar. No tenemos que correr e intentar encontrar ese lugar. A veces, justo el lugar donde nos encontramos es nuestro propio Jardín de Edén.Luz en el camino