Actitud

Una mujer muy sabia se despertó una mañana,
se miro al espejo,
Y noto que tenía solamente tres cabellos en su cabeza.
‘Hmmm’ pensó, ‘Creo que hoy me voy a hacer una trenza’.
Así lo hizo y paso un día maravilloso.

El siguiente día se despertó,
se miro al espejo
Y vio que tenía solamente dos cabellos en su cabeza.
‘Hmmm’ dijo,
‘Creo que hoy me peinare de raya en medio’
Así lo hizo y paso un día grandioso.

El siguiente día cuando despertó,
se miro al espejo y noto
que solamente le quedaba un cabello en su cabeza.
‘Bueno’ ella dijo, ‘ahora me
voy a hacer una cola de caballo.’
Así lo hizo, y tuvo un día muy, muy divertido.

A la mañana siguiente cuando despertó,
corrió al espejo y enseguida noto
que no le quedaba un solo cabello en la cabeza.
‘Que Bien!’ Exclamo.
‘Hoy no voy a tener que peinarme!’

Tu actitud es todo.

¿Casualidad?

Su nombre era Fleming, y era un granjero escocés pobre.

Un día, mientras intentaba ganarse la vida para su familia, oyó un lamento pidiendo ayuda que provenía de un pantano cercano. Dejó caer sus herramientas y corrió al pantano.

Allí, encontró hasta la cintura en el estiércol húmedo y negro a un muchacho aterrado, gritando y esforzándose por liberarse.

El granjero Fleming salvó al muchacho de lo que podría ser una lenta y espantosa muerte.

Al día siguiente, llegó un carruaje elegante a la granja. Un noble, elegantemente vestido, salió y se presentó como el padre del muchacho al que el granjero Fleming había ayudado.

“Yo quiero recompensarlo”, dijo el noble. “Usted salvó la vida de mi hijo”. yo no puedo aceptar un pago por lo que hice”, el granjero escocés contestó.

En ese momento, el hijo del granjero vino a la puerta de la cabaña. “¿Es su hijo?” el noble preguntó.”Sí”, el granjero contestó orgullosamente “Le propongo hacer un trato. Permítame proporcionarle a su hijo el mismo nivel de educación que mi hijo disfrutará. Si el muchacho se parece a su padre, no dudo que crecerá hasta convertirse en el hombre del que nosotros dos estaremos orgullosos”. Y el granjero aceptó.

El hijo del granjero Fleming asistió a las mejores escuelas y, al tiempo, se graduó en la Escuela Médica del St. Mary’s ,Hospital en Londres, y siguió hasta darse a conocer en el mundo como el renombrado Dr. Alexander Fleming, El descubridor de la Penicilina. Años después, el hijo del mismo noble que fue salvado del pantano estaba enfermo de pulmonía. ¿Qué salvo su vida esta vez? La penicilina.

El nombre del noble? Sir Randolph Churchill. El nombre de su hijo? Sir Winston Churchill. Alguien dijo una vez: Lo que va, regresa. 

Tabaja como si no necesitaras el dinero.

Ama como si nunca hubieses sido herido.

Baila como si nadie estuviera mirando.

Canta como si nadie escuchara.

Vive como si fuera el Cielo en la Tierra.

Anudar y Desanudar

Dos estatuas de tigres decoraban la entrada de la casa de un anciano chino. Como una de ellas no estaba terminada, el señor convocó a los artesanos del pueblo para finalizar la obra, pero ninguno logró llevar a buen término la misión encomendada.

El anciano decidió preguntar a un sabio cómo debía proceder. “Quien ató el nudo debe desatarlo”, fue el consejo de éste. El señor, entonces, dedicó todos sus esfuerzos a hallar al escultor que había comenzado aquella estatua y el trabajo fue concluido.

 

 

Una sola palabra

Es una palabra que lo dice todo y no dice nada.
Es la comunión de dos almas que sólo buscan ser una misma.
Es la mano que se extiende para dar y para darse.
Son los nombres de los que amamos.

Son los ojos que nos miran de una manera diferente.
Es el rostro que miramos tratando de entregarle el alma.
Es la fecha que no olvidamos.
El día que pensamos que realmente comenzamos a vivir.
El momento en que el dolor nos arropó y un abrazo nos hizo regresar a la vida.
Son las canciones que nos hablan de nuestras historias.

Son las lágrimas de una madre que se acaba de enterar que carga en su vientre a un hijo.
Son las palpitaciones en el corazón del padre que espera su llegada.
Es la sonrisa de un niño luego de haber pintado su tarea.
Es la carta que se escribe con ilusión y añoranza.
Es despertarse cada mañana y tener a alguien en quien pensar.
Son los amigos que siempre nos aman y no desaparecen con el tiempo.

Es perdón… es respeto…es cuando todo tiene sentido si se trata de nosotros.
Son los momentos de silencio. Es la risa y el llanto.
Es cuando puedo recostar mi cabeza
en el hombro de alguien y cuando presto mi hombro para que ese alguien
haga lo mismo.
Es cuando miramos ese ser querido y sin querer,
pensamos en todas las razones por las cuales le queremos tanto…

Es el perfume que nos recuerda ese alguien especial.
Es la respuesta a cualquier pregunta.
Es lo que somos y la razón por la que existimos.

Es un madero y su historia.
Son los amigos que se aman como hermanos.
Es un suspiro… una emocionada caricia… un beso.
Es una palabra en el momento correcto e indicado
buscando afanosamente expresarlo todo.

Es la razón de vivir de cada hombre y mujer sobre la tierra.
Es lo que muchos buscamos sobre la tierra.
Lo que otros condenan y rechazan.
Es todo lo que queremos, y cuando está en nuestras manos,
es como nada.
Es el sinónimo de vida en cuatro letras….
AMOR

Arriesgarse

Reír es arriesgarse a parecer un tonto.

Llorar es arriesgarse a parecer un sentimental.

Hacer algo por alguien es arriesgarse a involucrarse.

Expresar sentimientos es arriesgarse a mostrar tu verdadero yo.

Exponer tus ideas y tus sueños es arriesgarte a perderlos.

Amar es arriesgarse a no ser correspondido.

Vivir es arriesgarse a morir.

Lanzarte es arriesgarte a fallar.

Esperar es arriesgarse a la desesperanza. Pero debes tomar los riesgos, porque el peligro más grande en la vida es no arriesgarse.

La persona que no arriesga, no hace ni tiene nada. Posiblemente evite sufrimientos y preocupaciones, pero simplemente no puede aprender, sentir, cambiar, crecer, amar y vivir.

Sólo una persona que se arriesga es libre.

 

Autor Anónimo.